Entrevista a José Jaime Linares

Este cambio de nombre se produjo porque nos dimos cuenta de que realmente los tiempos estaban cambiando, hacer producción ya no significaba solo hacer cine. Ya se empezaba a ver un poco el mundo de la televisión, las series, e incluso la publicidad, u otros formatos que iban llegando. Es aquí, cuando nos dimos cuenta de que era más adecuado llamarnos “Profesionales de la Producción Audiovisual”.

Este cambio de nombre resultó ser bueno, nos abrimos a muchos más sectores de la producción audiovisual, como se ha mencionado anteriormente, al sector de la publicidad, las series de televisión y las diferentes plataformas. Hemos crecido porque nos hemos abierto.

 Los objetivos principales de Asociación son sobre todo: La profesionalización del sector, dar herramientas, formación, investigación, trabajos y estudios, a los trabajadores del sector de la producción, que hagan que su trabajo sea cada vez mejor, que tenga mayor cantidad de información, y estén más preparados e informados para todo lo que está llegando.

Estar asociado a la “Asociación de profesionales de la Producción Audiovisual” significa aprender. Quién está en APPA es porque quiere aprender, y quiere mejorar.

Sin ninguna duda. Estar en APPA significa estar con toda la información al día, y no solamente de la información de tu comunidad o tu país, también a nivel internacional.

En APPA tenemos acuerdos internacionales. Nuestras noticias normalmente se limitan a nivel nacional, pero también, en ocasiones, todo lo que entendemos que pueda ser importante a nivel internacional lo incluimos. En vez de estar buscando información por todos los lugares, y perderte muchas cosas, estar en APPA significa estar informado, de todo lo que interesa y puede ayudar.

 

•  ¿Que servicios ofrece la Asociación de Profesionales de Producción Audiovisual, quéela diferencia de otras asociaciones existentes dentro del sector?

Nosotros tenemos unas características diferenciadoras: Nosotros somos principalmente directores de producción, agentes de producción, ayudantes de dirección y contables. Y no tengo muy claro, que exista una asociación con esta característica, lo que sé es que desde luego no a nivel nacional.

APPA no tiene competencia. Además, España es un país no muy acostumbrado al “asociacionismo”, y no es que tengamos precisamente demasiada competencia con y entre las asociaciones. Seguramente sería bueno que hubiese más asociaciones, pero no las hay. Hay que añadir, que tampoco la gente puede gastarse tanta cantidad de dinero en tantas asociaciones, al final uno elige una y esa es la que le tiene que funcionar.

 Si, claro. Tenemos una muy buena relación con Spain Film Commission. Organizamos entre ambas viajes a localizaciones, visitas a esas ciudades que nos llaman para que puedan ser futuras localizaciones para rodajes. 

Trabajamos también con la AEC, que es la Asociación Española de Directoras y Directores de Fotografía.

Además, estamos creando una federación, donde nos hemos juntado 20 asociaciones de todo el país, para hacer una federación de asociaciones de técnicos, ya que no existe ninguna en España.

 Puntualmente nos reunimos con el Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA), del Ministerio de Cultura. Tenemos una muy buena relación y bastante fluida, y hablamos de los temas en los que podemos aportar y contribuir. Por ejemplo, últimamente uno de los temas más importantes que se ha tratado en conjunto ha sido el protocolo o guía de buenas prácticas para lo audiovisual, el cual ha sido en gran medida aportado por APPA. Y claramente, esto ha sido un trabajo en conjunto con el gobierno.

 No suficiente. Tiene un interés muy relativo, en el sentido de que lo utilizan en casa para ver en la tablet, a través de las diferentes plataformas. Y es que, la sociedad carece de la suficiente formación cultural, y no es ella la culpable en sí, es culpa nuestra; de las asociaciones, del gobierno y de los diferentes ministerios, que deberíamos culturizar y enseñar a las personas, desde casa y desde las escuelas, la importancia de la cultura y de la propiedad intelectual. Si esto fuera así, existiría un mayor respeto por las cosas que se ven y se entenderían bien. Y es que, no se sabe muy bien cómo se realizan las películas y las series, todo el trabajo que lleva detrás. Es muy fácil despreciarla y guardarla con cierta frialdad, como sucede muchas veces.

Y hablando de esto, en este confinamiento se ha consumido mucho contenido audiovisual, y me he podido encontrar con personas que critica la cultura del sector audiovisual, y después, cuando llega a su casa consume series televisivas. Todo esto no viene por “Una vía divina”, no, somos nosotros los que hacemos lo que después ves tu en casa.

 

 En España existe un poco interés por parte del gobierno, el “justito” diría yo. 

España en un país que necesita creerse que la cultura es más importante, y eso depende mucho de los gobiernos tanto nacionales como autonómicos. Es verdad que tenemos cosas, pero está claro que estamos muy lejos de otros países que vemos y conocemos que cuentan con mucha más atención, presupuestos y respeto hacia la cultura.

 

 Es muy necesario que el gobierno entienda que la cultura y los que hacemos cultura en todas sus variables somos necesarios para que un país sea inteligente. Sin cultura no aprendemos. La cultura nos ofrece una ventana al exterior.

Existen países, como Francia, que tenemos al lado, y es un buen ejemplo de lo que deberíamos aprender en ese sentido.

       ● ¿Cómo es posible levantar y afrontar la financiación de un proyecto?

No es fácil levantar un proyecto en este país, no se cuentan con las ayudas necesarias. Estamos muy lejos de las ayudas que se ofrecen otros países para levantar un proyecto. En España hay pocas televisiones para tanto proyecto, además, somos demasiado anglosajones en ese sentido, la audiencia cuenta siempre con las series americanas antes que las españolas, y eso lo hace bastante difícil.

     ● ¿Existen en España, para los rodajes, las suficientes ayudas de las distintas Administraciones, Locales, Autonómicas, estatales, internacionales, etc.?

Existen estas ayudas en España. Por ejemplo el ministerio de cultura invierte 50 millones de euros anuales para el cine. Pero, es que estos 50 millones son 5 capítulos de “Juego de Tronos” (Game of Thrones), y películas americanas son cuatro veces esto. Con esto quiero decir, que es muy poca financiación la que se aporta para poder hacer una producción. 

La media española de una película esta en 3 o 5 millones de euros, por lo cual, siendo esta ayuda de 50 millones, ¿De cuantas ayudas a películas estamos hablando? ¿10 o 15 películas al año?. En realidad, en España se hacen casi 300 al año, entre diferentes documentales y películas, por lo cual es imposible ayudar a todas. Se necesita mucha más ayuda.

    ● Teniendo en cuenta que solo el 8,17% de los actores en España pueden vivir de la profesión ¿Están sufriendo los trabajadores del sector audiovisual en España una gran crisis? Si la respuesta es si, ¿Es posible superarla? 

El sector audiovisual ha estado en crisis desde que tengo memoria, siempre hemos estado en crisis. Cuando te dedicas a esto, es porque realmente te tiene que gustar, no por otro motivo.

Siempre estamos en crisis porque carecemos de regularidad; o bien tenemos cuatro proyectos, y solo podemos elegir uno o hacerlos o la vez, o bien no tenemos ninguno porque se nos han caído todos. Siempre hemos estado en crisis, y siempre hemos sufrido, estamos muy acostumbrados a esto. 

Yo creo que ahora estamos viviendo unos años realmente buenos, con la entrada de las plataformas y los encargos de las series que están viniendo, esto ha favorecido al sector, sin ninguna duda.

    ● Con el surgimiento de plataformas digitales como Netflix, HBO o Amazon Prime, el número de producciones audiovisuales no dejan de aumentar. ¿Consideras esta una ventaja o desventaja para la creación de empleo en el sector? ¿Por qué?

Sí, sin duda. La creación de estas plataformas ha supuesto una mayor necesidad de empleo. De hecho, también han cambiado un poco las formas de trabajar.

Sin embargo, creo que tenemos que buscar el equilibrio. A veces tengo la sensación de que hay mucho poder en ellos y son ellos las que van marcando las pautas, y tampoco debería ser así, que una sola plataforma marque a todo un país, el cómo, cuándo y de qué manera. Creo que es necesario buscar ese equilibrio entre los técnicos.

Yo creo que es bueno que existan estas plataformas, porque aporta más trabajo, sin duda alguna, al estar estas plataformas hay más opciones, y sobretodo se ha descentralizado el trabajo y este punto es muy importante. No todo se puede rodar en Madrid o en Barcelona, es muy importante que la gente entienda que hay otras zonas, como Cantabria, País Vasco o Comunidad Valenciana. Hay muchos lugares, muy preparados y con gente muy competitiva, y cada vez se están abriendo más las series. Porque se tiene que descentralizar, para que no todo vaya al mismo sitio.

    ● Por tanto, esta centralización que existía del trabajo, en las ciudades de Madrid y Barcelona, y que ahora han venido las plataformas digitales a terminar con ello ¿Se trataba de una factor que impulsaba el desempleo en el trabajo audiovisual? 

Sí, sin duda, el hacer esta centralización ha aumentado el número de trabajadores aquí en Madrid, porque es donde están los estudios. Pero, también a la vez, no todo puede ser en plato, hay que salir. Este país es muy rico en imágenes y en zonas, por ello yo invito a las personas a que busquen y se trabajen las series y películas mas haya de Madrid, hay mucha España para rodar.

    ● La situación del COVID-19 supuso un parón total en la producción audiovisual ¿Cómo ha afectado esto al sector? ¿Qué problemas se han encontrado?

La situación del COVID-19 ha afectado como “una losa de hierro encima de la cabeza”, ha sido durísimo. Diría yo, que más duro que la crisis del 2007, porque este ha sido un parón absoluto, un “frenazo” del día a la mañana. Poco a poco fuimos parando todos, hasta que entro el Estado de Alarma y todos tuvimos que parar, todo se congeló.

Se han sufrido muchos problemas. Por una parte los técnicos, que estamos en el régimen de artistas, sufrimos la falta profesional por parte del SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal) de poder ayudarnos para regularizar nuestras ayudas, ya que no existen suficientes personas en el SEPE conocedoras de cómo tratar el régimen de artistas. Y es que, son miles de compañeros los que han sufrido retrasos o todavía no han podido ser atendidos, debido a esta falta de no saber cómo atender a un régimen de artistas.

Por otra parte, hemos sufrido el problema de la vuelta de los proyectos, ya que se juntan, los que se tienen que retomar con los que están previstos para ahora, y esto hace un efecto de “solaparse proyectos”, y está creando, ahora mismo, una situación muy complicada. Esta situación ha creado un efecto de falta de muchas cosas, técnicos y actores que tienen fechas comprometidas con dos películas a la vez, una que se ha retrasado y se retoma ahora, y otra que ya estaba comprometida para ahora, ¿Donde va a este actor? ¿Que hace?. Es una situación muy complicada y se está intentando resolver.

Sin embargo, para mi existe una ventaja en el sector audiovisual. Como he dicho antes, el sector audiovisual es un sector acostumbrado a estar en crisis, acostumbrado a sufrir siempre con altibajos, nunca ha sido cómodo trabajar en este sector. Entonces, empezamos a trabajar y salimos a rodar, y amamos tantísimo nuestro trabajo que ni el COVID-19 puede con nosotros. Seguiremos luchando y buscando la forma de seguir trabajando.

    ● Y por último, ¿Cómo ves el futuro para los trabajadores del sector audiovisual? ¿Se saldrá de esta crisis que tanto machaca el sector?

Yo creo que el 2021 y 2022, van a ser dos buenos años, siempre y cuando el COVID-19 nos lo permita. Tengo fe, en que antes de que acabe este año, podría dejar de ser ya un problema, podríamos quitarnos ese miedo, que lleguen esas vacunas y poder estar tranquilos, y no estar temiendo que se contagie algún miembro del equipo y tener que para el rodaje.

Y tengo mucha fe, en que estos dos años van a ser muy buenos, gracias a los nuevos incentivos fiscales, que ya cuentan en la actualidad con unas ventajas competitivas a nivel mundial. Tengo muy claro que tenemos un país muy rico, se que muchos países lo dicen, pero yo tengo muy claro que mi país cuenta con unas localizaciones geniales, y pongo “la mano en el fuego” por todos los técnicos que tenemos en el sector audiovisual, que son de lo más competitivo que hay a nivel por lo menos europe, igual o más que los demás, y podemos hacer grandes cosas.

Con lo cual, si la parte empresarial, financiera y las plataformas y televisiones, si todas ellas se esfuerzan más en sus ventas y apuestan más por las películas españolas, en vez de por las extranjeras, como hacen otros países, protegiendo a la vez nuestro sector y nuestra cultura, seremos capaces de tener unos buenos años por delante. Y por otro lado, si el estado empieza a formar e informar educar a los alumnos, los niños y los jóvenes, dentro de pocos años tendremos una sociedad que crecerá sabiendo que hay que defender la cultura, ya que es un patrimonio que tenemos que defender siempre.

 

 Autora: Carlota Pajares